Las personas, algunas en mayor grado que otras, tenemos esta gran capacidad de captación de los estados anímicos de nuestro alrededor. Estos estados psíquicos son la expresión misma de la Energía. Es la forma que la Energía del Universo toma en el ser humano: Emoción.

La gestión de estos estados no es algo sencillo. Muchas veces ni siquiera podemos ponerlos en palabras… pero en no pocas ocasiones el impacto de estas energías a las que nos exponemos en el entorno laboral, social o familiar, tienen un efecto en nuestro organismo que genera los estados de malestar que pueden acabar derivando en patologías. Al no poder ni siquiera ponerles nombre, estas energías quedan atrapadas en nuestro campo psíquico, energético y finalmente físico, constituyendo bloqueos que rara vez la medicina convencional (alopática) es capaz de diagnosticar, porque ni siquiera contempla la dimensión sutil en la que las afecciones se generan.

Respaldando mi práctica en el estudio del sistema de conocimiento yóguico del Tantra, a través de mis sesiones personalizadas empleo variados recursos, como el uso de sonido armónico, cristales y minerales, péndulo o Reiki, para restablecer el funcionamiento equilibrado de las fuerzas vital y mental de mis pacientes, ayudando a recuperar el intercambio energético entre los distintos cuerpos (físico, energético, mental, espiritual y causal).

Todo el trabajo está centrado en la activación y limpieza de los principales canales energéticos y centros de distribución energética (Nadis y Chakras respectivamente, en sánscrito).

Como dice André Van Lysebeth, «Los chakras forman parte al menos tanto de nuestra estructura psíquica unidimensional como del cuerpo pránico». A pesar de estar situados en la dimensión sutil de nuestro Ser, tienen una total vinculación con el cuerpo físico, de manera que los principales chakras están asociados -no identificados- con los plexos nerviosos y glándulas endocrinas más importantes.
Esta correlación es esencial en el trabajo que realizo en las sesiones de alineación.

Así mismo, la Ley Universal descrita en la Física tradicional como Resonancia Mecánica es el hilo conductor de toda la práctica, ya que, como esta ley explica, las vibraciones de la misma frecuencia armoniosa resuenan entre sí, y todos nuestros sistemas buscan la homeóstasis; siendo que el sistema energético puede armonizarse a través de estas frecuencias armónicas a las que se expone durante la sesión.

Esta armonización permite restablecer el flujo correcto de la energía, fundamental para mantener la salud y equilibrio, así como un estado de ánimo elevado; ya que a través de la transmisión de frecuencias energéticas armónicas la frecuencia del sistema nervioso, siendo como es el cerebro el centro de procesamiento electromagnético más poderoso del cuerpo humano, la calidad de los pensamientos también se ve mejorada; retroalimentando así ciclos de bienestar, en vez de abatimiento, tristeza, angustia o ansiedad.

Estas limpiezas son una ayuda, un sostén y orientación de tu propia energía para que puedas resetear tu estado integral y redirigir tu atención y energía.

Las sesiones tienen una duración aproximada de una hora y media. Debemos cuadrar nuestras agendas a través de una cita previa y encontrar el mejor momento para la sesión. La sesión tiene un valor de 50€.

Escríbeme por WhatsApp al 685963230 y me pondré en contacto contigo para concertar la cita.